Muy pertinente para la identidad de la capital húngara es la exuberancia neoclásica de su arquitectura. Una de las ciudades más bonitas de Europa, es la “perla del Danubio” la cual fusiona elegantes estructuras, paisajes únicos y un río emblemático, logrando así un efecto espectacular. No se puede perder importantes iconos estructurales como el Castillo Buda, el Parlamento de Hungría y la Basílica de San Esteban, que se encuentran a no más de 1,5 kilómetros de nuestro hotel más próximo. Antes de marcharse, asegúrese de contemplar las vistas desde Fisherman's Bastion, ya que es un destino muy popular para los viajeros.